Un polémico proyecto de ley pone en jaque los derechos territoriales de los pueblos indígenas en Brasil. De aprobarse el marco temporal, significaría la pérdida de tierras demarcadas luego de 1988. Las hermanas que trabajan con estas comunidades manifiestan su rechazo y lucharán junto a ellos para proteger sus territorios ancestrales. Si bien la tensión aumenta, las religiosas católicas se mantienen firmes en su misión, defendiendo el derecho a la tierra y la autodeterminación de estos pueblos originarios. “Somos pacifistas (…). Pero si es necesario, tenemos que luchar con ellos y moriremos juntos”, advirtió la Hna. Irma María Inés Vieira, de las Hermanas Mensajeras del Amor Divino, expresidenta del Congreso de Religiosos de Brasil.