Para celebrar el 70 aniversario de CRB, religiosos y religiosas recorrieron las calles en una peregrinación a Caninde, Ceará. (Foto: cortesía CRB)
Más de 800 religiosas y religiosos de diferentes congregaciones de todo Brasil se reunieron del 30 de mayo al 2 de junio en Fortaleza (Brasil) para celebrar el final del 70.º Año Jubilar de la Conferencia Nacional de Religiosos de Brasil (CRB).
Con el tema CRB 70 Años: Memoria, Mística, Profecía y Esperanza, la organización —que hoy tiene registrados más de 24 915 religiosos de votos perpetuos y 1757 votos religiosos de votos temporales— celebró la continuidad de su papel fundamental en el impulso a la vida religiosa consagrada en Brasil.
El congreso demostró que "la misión de la Conferencia de Religiosos de Brasil es importante para la propia vida religiosa consagrada y para nuestra Iglesia en general", dijo a Global Sisters Report la Hna. Eliane Cordeiro, presidenta de la CRB, al final del evento. "Tengo un sentimiento de profunda gratitud a Dios por todo lo que pudimos vivir", manifestó.
Al comienzo de la celebración de cuatro días se leyó una bendición escrita por el papa Francisco, quien agradeció el incansable servicio y testimonio de vida de los religiosos y religiosas en Brasil, destacando el importante papel que desempeñan en la evangelización, la promoción de la justicia social y la atención a los más necesitados.
"Agradezco el inmenso don de la vocación a la vida consagrada que, en sus más diversos carismas, enriquece la comunión eclesial y colabora enormemente con la misión de la Iglesia en todo el mundo", dijo en la carta, y añadió: "De hecho, en muchos lugares del planeta, el primer anuncio del Evangelio está en el rostro de consagrados y consagradas que asumen con gran compromiso y entrega de su vida el mandato del Señor: 'Id por todo el mundo y proclamad la Buena Noticia a toda criatura'".
El papa Francisco agradeció, a través de una carta, el incansable servicio de los religiosos y religiosas en Brasil, testimoniado en la evangelización, la promoción de la justicia social y la atención a los más necesitados
La peregrinación de los religiosos y religiosas por el 70 aniversario de la CRB llegó hasta el Santuario San Francisco de los Estigmas en Caninde, Ceará. (Foto: cortesía CRB)
El santo padre afirmó también que el don de la vocación debe ser custodiado y cultivado cada día y deseó que el evento fuera "un momento para recordar el pasado con gratitud, para vivir el presente sostenidos por la mística de los carismas específicos de cada familia religiosa y comprometidos de manera profética en el anuncio del Evangelio, y para mirar al futuro con esperanza".
Desde 1954, la CRB ha sido una voz profética en defensa de los marginados de Brasil, dijo Cordeiro. "La entidad se ha destacado por su trabajo en la lucha contra el hambre, la pobreza, la violencia y la discriminación. La CRB también ha sido una importante coordinadora de acciones en favor de la paz, la justicia social y la protección del medio ambiente", afirmó.
El congreso comenzó con una celebración eucarística presidida por el arzobispo de Fortaleza y presidente de la Comisión Episcopal de Cultura y Educación de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), monseñor Gregório Paixão, y concelebrada por 21 sacerdotes de diferentes estados brasileños.
"La gran expectativa es de una gran renovación de la alegría, del entusiasmo por la profecía; saldremos de aquí mucho más fortalecidos", dijo a la prensa la Hna. Maria Neves Franco, superiora general de las Hermanas Misioneras Capuchinas.
Según la organización, el evento presencial contó con participantes de todo Brasil y más de 10 000 visitas en las redes sociales de CRB, con personas que participaron a distancia.
"La intercongregacionalidad fue uno de los temas que trabajamos, animando a las congregaciones a que nuestra vida religiosa en Brasil siga el curso de las interconexiones, de modo que superemos los límites de la congregación y de la provincia, y tengamos una visión más amplia y universal de la misión de la Iglesia", dijo Franco.
Bajo el tema CRB 70 Años: Memoria, Mística, Profecía y Esperanza, la Conferencia Nacional de Religiosos de Brasil —integrada por más de 26 000 hombres y mujeres—, celebró su impulso fundamental a la vida consagrada en este país
La Hna. Daniela Cannavina, secretaria general de la Confederación de Religiosos Latinoamericanos, asiste al jubileo de la CRB para celebrar el caminar de sus hermanas brasileñas. "Nuestro continente es rico en una presencia muy grande de religiosos que piensan y sueñan con otras formas de ser Iglesia y otras formas de vivir la vida religiosa", aseveró en entrevista. (Foto: cortesía CRB)
Los participantes también vieron un documental preparado por CRB que narra los 70 años de vida profética de la institución, y recibieron una revista conmemorativa especial en la que se destacan los logros y los retos a los que se han enfrentado los religiosos y religiosas desde los inicios de esta organización.
Para Cordeiro, la CRB sigue contribuyendo a la Iglesia en Brasil "como instrumento para colaborar en la transformación" del mundo "y en la transformación de las estructuras de la sociedad brasileña". "Tuvimos cuatro obispos presentes en algún momento y creo que la comunión entre la CRB y la CNBB (Conferencia Nacional de Obispos de Brasil) se fortaleció durante estos cuatro días", añadió.
Los obispos del jubileo estuvieron de acuerdo.
"Es una verdadera experiencia del impulso del Espíritu Santo en la Iglesia de Brasil. La presencia de religiosos y religiosas, con sus carismas, con la diversidad de sus dones, enriquece mucho a nuestra Iglesia", dijo Mons. Ricardo Hoepers, secretario general de la CNBB, quien estuvo presente durante todo el evento.
"Cuando nos reunimos, sentimos verdaderamente la presencia del Espíritu Santo, guiando cada paso de cada uno de estos hombres y mujeres que dieron un 'sí' generoso a su vocación y a su carisma y hoy contribuyen a la Iglesia de Brasil", añadió el responsable de la CNBB.
El obispo auxiliar de la arquidiócesis de Manaus Edmilson Tadeu Canavarros dos Santos, también presente en la celebración, destacó la importancia de la vida religiosa en la región amazónica. "La Iglesia está en la Amazonia gracias a la vida religiosa. Ellas fueron las primeras en llegar con los carmelitas, los jesuitas y los franciscanos capuchinos", dijo. "Allí siempre hemos contado con la presencia de religiosas. En los lugares más lejanos y más difíciles, siempre encontramos vida religiosa", agregó.
Santos también tuvo un mensaje para los religiosos de Brasil: "No dejéis de ser signos proféticos en nuestra Iglesia. La vida religiosa es un signo profético y siempre nos despierta una mirada especial para que el Reino de Dios se haga realidad".
El congreso CRB 70 Años duró 4 días, e incluyó misa inaugural, peregrinación al Santuario de San Francisco de los Estigmas, homenaje a mártires religiosos brasileños y misa de clausura con el secretario de la Conferencia de Obispos de Brasil
Al congreso por el 70 aniversario de CRB celebrado en Fortaleza, Ceará, asistieron religiosos y religiosas de todo Brasil. (Foto: cortesía CRB)
A principios de este año, la CRB fue elogiada por la CNBB durante su asamblea general. El obispo auxiliar de Sao Paulo Ângelo Ademir Mezzari destacó en este espacio de reunión que "la historia de la CRB comenzó con la llegada de los jesuitas, junto con los portugueses, desempeñando un importante papel de evangelización en la Iglesia de Brasil".
Mezzari señaló también la importancia de celebrar los 70 años para "hacer memoria de la historia" de hombres y mujeres que "profesan los consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia, viviendo la experiencia de fe de un carisma y una misión, realizados en la vida fraterna en comunidad y espiritualidad".
Además de los miembros de la CNBB y la CRB, varios representantes de órdenes religiosas de fuera de Brasil se unieron a los de la CRB en Fortaleza. "Nuestro continente es rico en una presencia muy grande de religiosos que piensan y sueñan con otras formas de ser Iglesia y otras formas de vivir la vida religiosa. Nosotros continuamos el legado de esa mística con los ojos abiertos, siguiendo las huellas de Dios en nuestro tiempo", afirmó la monja capuchina argentina y actual secretaria general de la Confederación Latinoamericana de Religiosos (CLAR) Hna. Daniela Cannavina (HCMR), en una entrevista concedida a CRB.
El segundo día del evento estuvo marcado por la celebración de la mística, con participantes que peregrinaron al Santuario de San Francisco de los Estigmas, situado en Canindé, a 110 km de Fortaleza. La ciudad está considerada un importante centro de peregrinación y alberga uno de los mayores santuarios franciscanos del mundo.
"Caminar hoy con la vida religiosa consagrada hacia el santuario de San Francisco nos permite renovar nuestro compromiso con el cuidado de la vida, con el cuidado de nuestra casa común y permite que Francisco siga inspirándonos", declaró la Hna. Rosane Lundin, coordinadora general de la Congregación de las Hermanitas de la Inmaculada Concepción.
El tercer día del jubileo se destacó el profetismo, con un momento de celebración para aquellos que dieron su vida por la causa del Evangelio. La Hna. Dorothy Stang, de Notre Dame de Namur, el obispo Pedro Casaldáliga y el obispo Tomás Balduíno fueron algunos de los recordados.
Por su profetismo, algunos religiosos recibieron un homenaje en el congreso CRB 70: las hermanas Adelaide Molinari, Dorothy Stang, Cleusa Rody (mártires las tres), Genoveva ‘Tapirapé’, y los obispos Pedro Casaldáliga y Tomás Balduíno
"Fue posible ver hoy cómo muchas religiosas mártires, como la Hna. Adelaide [Molinari] y la Hna. Dorothy [Stang] dieron su vida en la región amazónica. La vida religiosa continúa siguiendo esta misión profética", señaló la misionera teresiana Hna. Kelly Simone da Silva Osório, coordinadora de la región de Belém (estado de Pará) de la CRB.
El jubileo terminó con una misa presidida por el secretario general de la CNBB, quien dijo que el punto culminante del acontecimiento fue cuando "todos los religiosos y religiosas consagrados pudieron darse la mano en este espíritu de intercongregacionalidad, y volver a sus comunidades con sus carismas fortalecidos para el bien de toda la Iglesia, Cuerpo Místico de Cristo".
"Después de la pandemia, pasamos por momentos muy difíciles en los que algunos confundimos separación y distanciamiento con aislamiento", explicó Cordeiro. "Recuperar esta alegría del encuentro, de la fraternidad, de la convivencia, de la hermandad, fue un reto. Pero creo que necesitábamos este tipo de encuentro para saber que la vida que llevamos merece la pena y que no estamos solos", añadió.